Para librarte de las obsesiones y el pensamiento obsesivo hay varias ideas fundamentales que debes tener en cuenta:
– Tú y tu mente no son la misma cosa.
– El trabajo de tu mente consiste en generar todo tipo de ideas, algunas buenas, otras malas, algunas racionales, otras irracionales, absurdas o sin sentido, y algunas aterradoras.
– Tu trabajo consiste en quedarte con las ideas que vale la pena considerar y descartar aquellas que te hacen daño.
Aquí encontrarás algunas técnicas para afrontar tus obsesiones.
1. Sal de tu tren de pensamiento
Imagina un tren con muchos vagones desplazándose por una vía. Cada vagón representa una idea que tu mente genera.
Así, en cada vagón habría un pensamiento como: “voy a llegar tarde”, “tengo hambre”, “soy torpe”, “tengo que revisar el trabajo porque puede haber errores”, “va a pasar algo horrible”.
Así, el tren llevaría todo tipo de pensamientos y algunos de ellos serían tus pensamientos obsesivos.
Hay dos formas de ver ese tren de pensamientos: desde lejos, como si lo miraras pasar desde un puente, o desde dentro, cuando te has subido al tren y estás dentro de un vagón.
– Debes estar atento a los contenidos de tu mente.
– Cuando surja un pensamiento obsesivo (o cualquier otro que no te interesa), no debes luchar contra él, sino observarlo, centrar toda tu atención en ese pensamiento para saber qué está pensando tu mente.
Luego lo imaginas en el vagón de tu tren de pensamiento, observando desde lejos, viendo como el tren se aleja llevándose tu pensamiento hasta desaparecer.
2. Sostén tus emociones
Sostener tus emociones significa que debes estar dispuesto a sentir tu ansiedad o malestar.
Solo hay un modo de acabar con las emociones desagradables, y es sentirlas hasta el final y quedarse con ellas hasta que se agotan por sí mismas.
3. Otras técnicas
– Canta tu obsesión: ponle la música de alguna canción que te guste y cántala.
– Repite la obsesión en voz alta lo más rápido posible durante 45 segundos. Aunque parezca un poco absurdo, funciona porque te ayuda a distanciarte de tus pensamientos e impedir así que dominen tu conducta.
– Escribe tu obsesión en una hoja, en letras grandes, ponla en la pared y obsérvala como lo haría un extraterrestre sin emociones que está observando a la especie humana.
– Describe lo que está pasando, lo que tu mente está haciendo: “mi mente está presentándome un pensamiento obsesivo y absurdo. Gracias, mente, por hacer tu trabajo”.
Las técnicas expuestas están basadas en la terapia de aceptación y compromiso (ACT). Es aconsejable que si padeces un TOC (trastorno obsesivo compulsivo) acudas a un psicólogo que conozca este tipo de terapia, además de otras técnicas.
Fuente: motivacion.about.com