La primavera y el verano suelen traer días soleados para disfrutar, pero los excesos suelen ser malos y el sol es uno de ellos.
Puede dañar tu piel, pero también tu cabello y es al que menos le pones atención a veces, así que mira lo que podrías pasar.
Los rayos UVA y los UVB modifican la textura y la apariencia del pelo.
Lo que sucede es que tu cabello está recubierto de una capa de lípidos y agua que envuelve la superficie y lo protege.
La parte más externa del pelo está recubierta por escamas que van selladas. Cuando el cabello está demasiado expuesto al sol, pierden la unión entre ellas y se abren.
Esto provoca que:
- Se rompan las puntas y aclara el color.
- Deshidrata y favorece la pérdida de flexibilidad.
- Cabello áspero, quebradizo y seco.
- Si te teñiste el cabello se puede decolorar.
Cómo cuidarlo
No exponerlo demasiado al sol, sobre todo entre las 12:00 y las 15:00 de la tarde.
Utilizar sombreros, pañuelos y turbantes, además están de moda.
Usa productos especiales para protección solar como cremas, geles y sprays.
Previo a estar expuesto al sol, utiliza acondicionadores y mascarillas nutritivas con filtro UV integrado.
Cuando termine el verano, una recomendación es cortarte las puntas.
Come alimentos ricos en vitamina C y E como cítricos, nueces, avellanas, almendras.
¡Cuida tu cabello!