Quizá estés llevando una “dieta cafetería” y no te hayas dado cuenta. En un principio puede parecer inofensiva, pero los excesos suelen ser bastante malos.
Qué es la “dieta cafetería”
Es un tipo de alimentación alta en grasa, suele tener platillos que encontrarías tal cual en una cafetería como donas, pasteles, café con mucha crema y azúcar, galletas, huevos fritos con tocino, barritas de cereal y sándwiches con queso amarillo.
Una alimentación basada en algunos de estos platillos suele ser más perjudicial que la comida rápida, como pizzas o hamburguesas, ya que solemos ver la dieta cafetería de forma inofensiva.
Y es que la gran mayoría de estos alimentos contienen aditivos, que en teoría no son dañinos para la salud, pero que terminan siendo muy perjudiciales, ya que suelen ser adictivos y se consumirse en grandes cantidades sin que la persona se dé cuenta.
El sabor y textura de algunos alimentos serán irresistibles, y esto se debe a ciertos químicos que son puestos “a propósito”.
Lo contrario de la dieta de cafetería es la dieta de la naturaleza, cocinando en casa con ingredientes naturales. Algo que debido a ciertas rutinas, falta de tiempo y otros factores, resulta muy difícil de llevar completamente.
Historia
A finales de los años 70, se realizaron algunos estudios al darse cuenta que la obesidad y sobrepeso iban en incremento. Los resultados aseguraban que la dieta que más hacía que las personas subieran de peso era una “dieta normal.”
No era alta en carbohidratos, grasas o azúcar, sino una alimentación basada en alimentos procesados como galletas, snacks, cereales de desayuno, carnes procesadas, zumos, refrescos. Productos que consumimos a diario.
Daños a la salud
Mantener una alimentación basada en alimentos procesados puede provocar migrañas, ataques de epilepsia, náuseas, espasmos musculares, alergias, entre otros.
Estos alimentos disparan los niveles de azúcar en la sangre, lo que provoca que si comes algo de este tipo, en poco tiempo te volverá a dar hambre.
Así que si comes un sándwich, toma en cuenta que algunos productos con los que lo preparas pueden disparar el azúcar en tu cuerpo y, aunque parezca saludable, en exceso no lo es.
Qué hacer
Quítale a tu cuerpo ingredientes que no reconoce como los químicos, aditivos, conservadores y azúcares que encuentras en productos procesados.
Opta por consumir más alimentos como frutas y verduras sin procesar y reducir el consumo de productos empaquetados.
No te preguntes cuántas calorías tiene un producto, mejor pregúntate si después de comer eso tendrás hambre. Si respondes que sí, es probable que sea un producto de la dieta cafetería.
Asiste con nutriólogos y especialistas de la salud para obtener una dieta adecuada a tu estilo de vida y necesidades físicas.
