La forma en la que crías a tus hijos influenciará poderosamente en su vida de adulto. Enséñales hábitos que los ayuden para toda la vida y evita algunos que podrían perjudicarlos.
Encontramos esta lista que podría ayudarte en esta tarea:
No les des todo lo que piden
Si cada vez que salen tienes que comprarles dulces, juguetes o ropa, algo malo están pasando. Los niños piden muchas cosas, pero no siempre las necesitan, si les damos todo los estamos acostumbrando a acumular cosas, a poseer objetos sin esforzarse y a tener poco autodominio.
Pelear frente a ellos
Todas las parejas tienen sus problemas, pero los niños no tienen por qué ser partícipes o testigos de ellas. El ver constantemente pelear a sus papás les podría brindar desequilibrio emocional, inseguridad y hacerles creer que las cosas se arreglan por medio de gritos.
Dedicar más tiempo al trabajo
Tus pequeños necesitan tiempo, si pasas más horas trabajando que en contacto con ellos, les estás privando de magníficas oportunidades de aprender las cosas esenciales de la vida directamente de sus padres.
Gastar más de lo que ganas
Vivir endeudado les puede hacer creer a tus hijos que la única forma de tener cosas es por medio de préstamos o créditos en vez del buen hábito del ahorro. Esto tarde o temprano terminará en problemas financieros que se pasan de generación en generación.
Hacer todo por ellos
Es normal querer que ellos no sufran lo que nosotros, pero al hacer todo por ellos, estamos quitándole su independencia y posiblemente criando futuros adultos que no saben cómo salir adelante por ellos mismos.
¿Estás haciendo estas cosas?
Fuente: disneybabble.com
