¡Es un hecho! Cuando los hijos llegan, te cambian totalmente la vida. Todo el mundo te lo dice cuando te quedas embarazada, pero no sabes cuán real es hasta que lo vives.
No es un cambio negativo, todo lo contrario, aunque muchas veces la gente lo dice en un tono lastimero “te va a cambiar la vida”, pero realmente no es así.
Encontramos esta lista de las cosas positivas que te pasan cuando tienes hijos. ¿Concuerdas con ella?
1.Valoras lo realmente importante
Durante el embarazo no hay nadie más importante que la madre y su bebé, si estás teniendo problemas en el trabajo, tienes estrés, amistades que no lo son… es el momento de limpiar tu vida, de cuidarte y de poner prioridades.
2. Gestionas mejor el tiempo
Como mujer podías hacer muchísimas cosas al el mismo tiempo, pero como mamá te sorprenderás de todo lo que puedes hacer en un día. Desde trabajar, cuidar de tu bebé, hasta atender otros asuntos. Claro, no eres una súper heroína, pero sí una súper mamá.
3.Mejoras tu alimentación
Procuras darle lo mejor a tu bebé, sobre todo en la lactancia, así que te cuidas más y comes sano, lo que quizá no hacías antes porque no tenías la suficiente motivación. Además, este modo de vivir te ayuda a perder esos kilitos de más que ganaste con el embarazo.
4. Aprendes a gestionar mejor los recursos.
Un bebé puede suponer un gran gasto inicial, depende de como te lo plantees, pero los ingresos son los mismos y hay que reorganizarse. También los recursos de espacio. Además te darás cuenta de la de recursos de entretenimiento de los que dispone tu cuerpo, canciones, gestos con las manos, vocecillas…
5. Sacas lo mejor de ti.
¿Creías que no tenías paciencia? ¿Creías que no se te daban bien los niños? Pues verás como sin darte cuenta, eres la mejor madre, o el mejor padre del mundo. Paciente, entiendes sus llantos, sus gruñidos, cubres sus necesidades, cantas, bailas, en fin.
6.Tu vida en pareja cambia.
Sí, la vida en pareja cambia. No desaparece pero se modifica. No es peor, ha nacido alguien de su amor, pero hay que saber cuidar a la pareja, seguir teniendo momentos para ustedes, y conversaciones que no sean solo de pañales.
7. Ves el mundo con otros ojos.
Todo se llena de alegría, cualquier día es bueno para celebrar cualquier cosa, nuevo diente, nueva habilidad. Cuando te haces mayor y ya conoces “todo de la vida”, se te olvida ver la belleza y la emoción de las pequeñas cosas, pues con tus hijos recuperas esas ganas de descubrir el mundo.
8. Cuidas más el mundo que te rodea.
Ese mundo que estás redescubriendo, de alguna manera empiezas a cuidarlo mejor., porque intentas que ese mundo sea para tus hijos.
9. Dices frases de madre.
A veces sientes que te convertiste en tu madre y que esas frases que tanto escuchaste, ahora las dices tú: “Te vas a caer… te lo dije” “Abrígate, yo tengo frío” “Que no es que no” “Es la primera vez que me siento en todo el día”… y la lista es larga.
10. Hacer cosas que no hacías hace años.
Con la edad dejas de hacer cosas que te divertían de pequeña. ¡Ahora lo haces! Brincar en la cama, jugar en la lluvia, hacer tareas de escuela y otras cosas que disfrutas de nuevo.
Cuéntanos, ¿y a ti cómo te cambió la vida el ser mamá?
Fuente: mujeresymadresmagazine.com
