Quizá no te des cuenta o le disculpes todo por el gran amor que le tienes, pero debes darte cuenta que algunas actitudes de tu pareja podrían identificarlo como un patán.
Los patanes tienen poder sobre ti y se aprovechan de ello, te controlan y someten. Toma en cuenta estas señales:
1. No está dispuesto a dejar sus vicios por estar contigo.
2. Sientes que te hace la vida más difícil en lugar de más feliz.
3. Te habla mal de otros hombres para que te quedes con él.
4. Te promete que todo va a cambiar, pero nunca sucede.
5. Te interrumpe en una conversación importante y no te pone atención mientras tú le cuentas cómo estás o cómo te fue en el día.
6. Te controla con dinero, te pide dinero y nunca te paga o hay trato desigualitario al pagar las cuentas, terminas pagando más tú.
7. Culpan a otros de sus acciones, nunca se hacen responsables por lo que dicen o hacen.
8. Se la pasan minimizando a las personas y engrandeciendo sus acciones.
9. Invalidan tus emociones, no son importantes o no son empáticos o considerados con lo que sientes. En cambio, un patán siempre buscará tu atención.
10. Se la pasa alabando a sus superiores o engrandeciendo a las personas que tienen poder sobre otras.
¡Aleja a los patanes de tu vida!
Según especialistas en temas de pareja y violencia estos son algunos consejos para alejar a un patán de tu vida:
Toma conciencia de la desigualdad
Sobre todo en la relación de poder que exista entre ustedes, así como los riesgos que corres. De esta manera sabrás cómo actuar para que no te falte al respeto y tu integridad esté intacta.
Apóyate en los demás
Debes informarte de las instancias legales o grupos que te brindan apoyo para denunciar y superar el maltrato, abuso u hostigamiento.
Habla y date tu lugar
Sólo basta con que expreses lo que necesitas. Por ejemplo: “Te pido que no me hables así” o “No me trates de esta manera, porque me siento…”
Aléjate
Si acabas de conocer a un “patán” (persona que te trata mal, no respeta tu tiempo y no muestra el mínimo interés en lo que dices), lo mejor es que te retires.
¿Convives con un patán?
Fuente: bienestar.salud180.com
