16.9 C
Mexico City
martes, marzo 19, 2024
- Publicidad -

Lo que me hubiera gustado saber antes de ser mamá

Fecha:

Autor:

Categoría:

Te compartimos este texto con mucho amor:

– No te ahogues

Cada pequeña etapa por la que pasa tu bebé se sentirá como cuando una ola te revuelca, como si fuera a durar para siempre, no sé por qué sucede esto.

Tal vez porque para tu bebé, la semana de brote de crecimiento en la que se alimenta en cúmulo es para siempre. Tal vez, porque tu bebé está pegado a ti como velcro, tus pezones están agrietados, y estás segura de que nunca vas a dormir de nuevo, quizás absorbes de tu bebé su sentido del tiempo.

Quizás sea algún mecanismo hormonal de supervivencia del más apto, código de ADN para asegurar que tomes en serio las necesidades de tu bebé.

Pero, muy pronto tu bebé no estará pidiendo pecho cada 20 minutos. Pronto le estarán saliendo dientes. Se negará a tomar siestas. Te llamará caca. Y te escucharás a ti misma decir cosas como: “Por favor, saca tu pene de la ventana”.

Toma cada etapa en serio, pero no te ahogues en ella.

– Lactancia

Durante un tiempos, tendrás los senos al aire. Todo. El. Tiempo. Tus senos verán más luz que tú, Leche tibia y pegajosa caerá goteando por tu vientre y te sentirás como una barquilla de helado en julio.

Esto también pasará, pero durante un tiempo, te sentirás como de página central de una revista… de National Geographic.

– Haz lo que funcione

Deja que tu bebé duerma en su marsupial o en tu cama o su silla de auto, si es ahí donde duerme. No eres un fracaso si no machacas purees orgánicos a mano. Está bien que te hagas las cosas un poco más fácil. Hay muy pocas decisiones irreversibles sobre los patrones de sueño y la alimentación en los primeros meses y años.

Tu hijo no se va a ir a la universidad necesitando aun dormir en marsupial (No lo hacen tan grandes, revisé! ) No va a estar desganado y malnutrido por rehusarse a comer cualquier cosa sino panecillos por una semana, o un mes.

– No estás sola

Otras madres también luchan. Ellas parpadean como velas, despiertas en la noche, en mil habitaciones, en el pasado, en el futuro, en este momento. Se encorvan sobre sus bebés, mientras amamantan. Blandas y desgastadas, como una toalla exprimida.

Recuérdalas cuando estés despierta por quinta vez en una noche. Cuando el bebé no deje de llorar, cuando tu no puedas dejar de llorar.

– Toma ‘tiempo fuera’

Tómate un tiempo para ti misma. A menudo. Implora, intercambia favores o paga a alguien para que cuide a tu bebé. Ve al yoga. Ve a dar un paseo. Ve a ver una película . Tu bebé no te necesita presente pero drenada, una mamá zombi. Una mambie.

Tu bebé necesita que estés bien. Tu bebé necesita que seas tu misma. Necesitar tiempo para ti misma no significa que estés tratando de escapar de tu bebé

Bueno, estas totalmente tratando de escapar de tu bebé. Eso está bien. Encuentra la manera de hacer algunas de las cosas que te mantienen sana y feliz. Tu bebé te necesita sana y feliz.

– Pide ayuda

Pídele ayuda a tu pareja. No es su intención quedarse ahí sentado en una silla jugando Mortal Kombat. Con el tiempo va a mostrar más interés en el bebé, cuando se puede reír, abrazar y jugar fútbol. Pero por ahora, necesita que le digas que requieres su ayuda.

Pídela

Y cuando lo haga, no les diga cómo cuidar a su hijo. O dile, pero luego dejarlo ir. Él probablemente vaya a ver a Pulp Fiction con tu bebé. Y dejará que tu precioso pequeño roa cortezas de pizza como un perro callejero. Tu bebé va a estar bien en ambos casos.

A continuación, sal de la casa

Si no lo haces, tu pareja se levantará de su silla como Zeus. te encontrará y te sugerirá que el bebé necesita leche. A pesar de que lo acabas de amamantar.

– No limpies

Tu casa todavía estará desordenada en cinco años. Lo siento, pero es verdad. Así que cuando tu bebé duerma, toma una siesta. Lee un libro. Mira fotos de las casas limpias en Pinterest.

Pero no limpies..

– Encuentra tu tribu

Busca otras mamás que admitan que no todo es talco y felicidad. Las citas de juegos no fueron inventadas para sobre-programar y socializar a tu hijo. Existen para que puedas admitir que le gritaste: ” ¡Por el amor de Dios, puedes simplemente dormirte” a tu hijo de seis meses de edad. Que sentaste a tu hijo a ver plaza sésamo durante horas mientras llovía y llovía y llovía.

– Sé una “hater”

A esas madres que parecen tener todo resuelto? Las supermamás talla S que se ven alegres y bien descansadas? Las que transportan grandes pañaleras de diseñador llenas de aperitivos saludables y protector solar y una muda de ropa extra y desinfectante para las manos ?

Está bien desearles pequeñas desgracias, como incontinencia fecal o herpes ocular.

– Estás en camino

Escucha : Sé que te sientes como si estuvieras haciendo todo mal, sé que lo que está en juego es muy alto y que el resto de las madres parecen saber lo que están haciendo .

Deja un poco de leer libros y blogs acerca de cómo se supone que debes criar a tu hijo. Tu bebé está razonablemente limpio y en crecimiento.

¿Ves cómo se derrite en tu hombro y se queda dormido?

Como cuando finalmente vas al supermercado sola y te das cuenta que estás en línea balanceándote como si todavía lo tuvieras en tu panza.

Y le sonríes a la mamá que es la siguiente en línea y va con un bebé de la misma edad y te baja la leche y te sientes como “Hey, algo falta, será que me olvidé de mis llaves?”

Y entonces te das cuenta de que lo que falta es tu bebé.

Lo estás haciendo muy bien.

Texto de: Lynn Shatuck
Fuente: 9 Lunas

- Publicidad -
- Publicidad -